12º Encuentro Usuarios Retroinformática (8/11/2025)

LUGAR

Centro Ciudadano Guajara
La Laguna

ENTRADA LIBRE
¡TE ESPERAMOS!

PROGRAMA

• 10:00h. Apertura.
• 12:00h. Talleres y exposiciones microordenadores clásicos.
• 14:00h. Descanso.
• 15:30h. Torneos de juegos Retro.
• 18:30. Cierre.

En nuestras reuniones nos encontrarás cacharreando, probando, jugando y sobre todo charlando sobre temática del panorama retro, ya sea del pasado o de la actualidad.

Te animamos a acudir a nuestras reuniones y visitarnos, curiosear, conversar con cualquiera de nosotros y por supuesto llevar tus propios equipos como si estuvieras en tu casa, no es necesario que traigas pantallas, tenemos a nuestra disposición desde las nostálgicas pantallas CRT a pantallas planas para que enchufes tus equipos disfrutando de un rato agradable y divertido.

Nuestro lugar de reuniones es el Centro Ciudadano Guajara, situado en la Calle Fraternidad, 2 en San Cristóbal de La Laguna, en un recinto de ensueño ubicado en una tranquila zona al lado del Centro Comercial Alcampo y del Parque Jardines de Guajara, con amplios aparcamientos y buenas comunicaciones.

CRÓNICA DEL 12º Encuentro de Usuarios de Retroinformática

RetroCanarias celebra el 40º aniversario del Commodore Amiga
Centro Ciudadano de Guajara – Sábado 8 de noviembre de 2025

El pasado sábado 8 de noviembre de 2025 tuvo lugar en el Centro Ciudadano de Guajara uno de los encuentros más memorables que se recuerdan dentro de la comunidad RetroCanarias. No exageramos si decimos que fue una reunión apoteósica: por la magnitud del despliegue técnico, por la emoción compartida y, sobre todo, por el motivo que nos convocaba —el homenaje al cuarenta aniversario del nacimiento del ordenador Commodore Amiga 1000—. Aquella máquina legendaria, que en 1985 redefinió lo que significaba tener un ordenador personal, fue la absoluta protagonista de la jornada.

Desde primera hora de la mañana el ambiente era de entusiasmo. Los asistentes iban llegando con cajas, monitores CRT, teclados, cables de vídeo, disqueteras, folletos, carteles y, por supuesto, los siempre imprescindibles termos de café. En cuestión de minutos el centro ciudadano se transformó en un auténtico museo vivo de la historia de la informática doméstica. No había un rincón libre: mesas repletas de equipos, manuales originales, periféricos imposibles de conseguir hoy día, e incluso merchandising de época que despertaba una sonrisa en todo aquel que lo tocaba.

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Un homenaje a la leyenda: el Amiga 1000

El eje del encuentro fue, sin duda, el Amiga 1000. Presentado originalmente en 1985, este ordenador marcó una nueva era en el mundo de la informática personal. Fue el primer sistema doméstico en ofrecer multitarea real, gráficos en color de alta resolución y sonido estéreo digitalizado, todo bajo una interfaz gráfica que adelantó en años lo que otros sistemas tardarían en adoptar.

En la exposición pudimos admirar una unidad perfectamente conservada de este modelo, aportada por Angelo, que además de su impecable Amiga 1000 trajo consigo una cuidada colección de material complementario: revistas de la época, manuales en italiano e inglés, y una impresionante selección de software original. A su lado, un televisor CRT de 14 pulgadas reproducía sin descanso demostraciones gráficas, animaciones y programas multimedia que dejaban claro por qué el Amiga fue el referente indiscutible del arte digital de los años ochenta.

Técnicamente, el Amiga 1000 era una maravilla. Montaba un procesador Motorola 68000 a 7.16 MHz, acompañado de 256 KB de memoria RAM ampliables. Su arquitectura estaba compuesta por el célebre conjunto de chips OCS (Original Chip Set), donde Agnus, Denise y Paula trabajaban de forma conjunta para ofrecer gráficos y sonido sin precedentes. Gracias a ellos, el sistema podía manejar resoluciones de hasta 640×512 píxeles y mostrar hasta 4096 colores simultáneos en modo HAM, algo simplemente inimaginable para los PC o los Macintosh del momento.

El audio, gestionado por el chip Paula, ofrecía cuatro canales estéreo independientes con calidad PCM de 8 bits, lo que convertía al Amiga en una pequeña estación de sonido digital. No es de extrañar que músicos, diseñadores y programadores adoptaran rápidamente la máquina como su herramienta favorita. En esta reunión, esas capacidades fueron revividas con una precisión casi arqueológica.

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Un despliegue técnico sin precedentes

El espacio del centro ciudadano tuvo que reorganizarse completamente para albergar tal cantidad de material. Se recuperó la clásica disposición en forma de L, con una zona dedicada en exclusiva a los ordenadores Amiga, y otra para el resto de sistemas invitados.

En el ala izquierda se alineaban orgullosos varios modelos de la familia Amiga:

• Amiga 500, con su monitor CRT original.
• Amiga 1200, actualizado con una HXC integrada.
• Amiga 2000, que hacía su primera aparición en los encuentros de RetroCanarias, acompañada de su teclado completo y monitor.
• Amiga 600, pequeño pero carismático, compartiendo espacio con material de merchandising.
• Amiga CDTV, otro que hacía su primera aparición, todo un espectáculo multimedia.
• Y, por supuesto, el Amiga 1000 de Angelo, verdadero protagonista del homenaje.

Cada equipo contaba con cartelería explicativa: año de lanzamiento, especificaciones técnicas, chipsets, versiones del sistema operativo y anécdotas sobre su legado. Un auténtico museo portátil, un parque temático organizado con mimo por Nivaria y Angelo, que incluso se tomaron la molestia de reproducir los folletos originales de Commodore para ofrecer al público una experiencia casi museística.

En la mesa lateral se encontraba un rincón que despertó especial curiosidad: una Amiga CDTV, híbrido entre ordenador y reproductor multimedia doméstico. Este modelo, pionero en su intento de llevar la informática al salón, estaba basado en la arquitectura del Amiga 500, pero con capacidad para leer discos CD-ROM, a través del Caddy. Angelo la equipó con una Gotek externa, lo que permitió disfrutar de juegos y aplicaciones de la época, además de reproducir música directamente desde el sistema. Durante buena parte de la tarde, la CDTV se convirtió en una auténtica discoteca retro, sonando temas del ProTracker y demostraciones musicales de la escena demoscene clásica.

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El sonido del pasado vuelve a vibrar

Una de las características más impresionantes del encuentro fue el cuidado puesto en el audio. Angelo no se conformó con mostrar los ordenadores: conectó un par de altavoces estéreo a los Amiga para que el público pudiera disfrutar del sonido original en toda su amplitud. Los acordes del Lotus II, los efectos de Turrican 2 o las melodías del Sensible Soccer resonaban con claridad por toda la sala.

El Video Toaster y Scala, famoso sistema de edición y composición de vídeo del Amiga, también tuvo su momento de gloria. Conectado al Amiga 1000, permitió a Angelo realizar videomontajes en vivo, superponiendo imágenes, texto y efectos visuales. Los asistentes quedaron maravillados al ver cómo un equipo de 1985 podía comportarse como un estudio de televisión profesional. De hecho, muchos se acercaron a preguntar detalles técnicos: resolución de salida, sincronización de señal, e incluso cómo se lograba la composición en tiempo real sin hardware adicional.

El secreto, como explicó Angelo, residía en la eficiencia del hardware dedicado del Amiga, que descargaba a la CPU de tareas gráficas y sonoras. En los ochenta, eso era casi ciencia ficción.

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Competencias, risas y piques amistosos

Como todo buen encuentro retro, no podían faltar los torneos y los piques entre amigos. El gran clásico volvió a ser Sensible Soccer, donde Angelo y Nivaria se enfrentaron en una serie de partidos legendarios. Nivaria, que jugaba con un joystick arcade R, tardó varios encuentros en descubrir el botón de disparo —literalmente—, lo que provocó resultados abultados y muy claros a favor de Angelo (4-0, 3-0, 2-0…). Sin embargo, en el cuarto partido Nivaria logró un triste empate y más tarde una victoria 2-1, en el que siendo honestos Angelo se dejó llevar ante la inoperancia de Nivaria, demostrando que la supremacía de Angelo en este juego es incontestable.

El segundo gran título de la jornada fue Lotus II: R.E.C.S., jugado en una pantalla de 42 pulgadas que ofrecía una experiencia visual espectacular. Los asistentes se turnaban para competir por los mejores tiempos, pero de nuevo fue Angelo quien se alzó con el título honorífico del día.

Mientras tanto, en la zona derecha del salón, el usuario NameKop se dedicaba a realizar modificaciones en su Spectrum +3, ajustando el código de su participación en el concurso “El Peor Juego del Año”, una iniciativa que, con su sentido del humor habitual, premia al desarrollo más torpe o caótico. Paradójicamente, quien crea el “peor juego” gana, mientras que quien hace el mejor tiene que organizar el concurso del siguiente año.

El juego que NameKop presentó —protagonizado por un profesor lanzando tizas a sus alumnos distraídos— fue objeto de carcajadas y competencia sana. Hubo un pique especialmente divertido entre NameKop y Nivaria, que se disputaron el récord de puntuación. Nivaria finalmente alcanzó los 4.644 puntos, superando el anterior registro de 4.077 de NameKop , lo que le valió el reconocimiento general y un lugar de honor en la “tabla de deshonra” del concurso.

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Más allá del Amiga: otras joyas en exposición

Aunque el homenaje principal era para Commodore, otros sistemas clásicos también tuvieron su espacio. El MSX Toshiba HX-20, acompañado de su controladora disquetera TDC600, permitió revivir juegos en formato disquete de la colección MSX Manía. Los asistentes pudieron comprobar lo rápido que cargaban los títulos y la calidad del sonido PSG de la máquina.

Un Commodore 64 en formato FPGA, con una Ultimate 1541 integrada, hizo las delicias de los nostálgicos del chip SID. Escuchar las melodías de The Last Ninja o Commando en un sistema tan compacto recordaba por qué este sonido sigue siendo venerado por los amantes de los 8 bits.

Incluso apareció una Nintendo Famicom System en manos de Namekop y Wurgado, orgullosos de mostrar la consola japonesa en su versión original, con mandos integrados y ranura de cartuchos en la parte superior. La mezcla de equipos y generaciones recordaba a todos los presentes que la retroinformática no es solo nostalgia, sino una celebración del ingenio y la creatividad tecnológica.

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Documentos, libros y tesoros en papel

Entre los materiales expuestos destacaban verdaderas joyas documentales. Manuales de usuario originales del AmigaOS, el libro “Compendio del Amiga”, manuales de Workbench y AmigaDOS, así como un archivador completo de Amiga Software con fichas técnicas, diagramas de hardware y trucos de programación. Ver esos documentos físicos, amarillentos por el tiempo pero perfectamente conservados, era casi como hojear la historia misma de la informática creativa.

También se expusieron cajas originales de juegos míticos como Lemmings, Sensible Soccer, Arcade Pool y Scrabble. Muchos asistentes se detuvieron a admirar las portadas, esas ilustraciones coloridas que eran pequeñas obras de arte en sí mismas.

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El espectáculo multimedia final

La jornada culminó con un verdadero espectáculo audiovisual. Angelo convirtió el Amiga 1000 en un estudio de televisión improvisado, empleando el Video Toaster y programas de composición como Scala MM300. En las pantallas CRT se veían superposiciones de texto, títulos animados y efectos en tiempo real. Todo generado por una máquina de hace cuatro décadas.

La música, creada en ProTracker, llenaba la sala de ritmos electrónicos ochenteros. Muchos asistentes, incapaces de resistirse, comenzaron a moverse al compás. El centro ciudadano se transformó por unos minutos en una pista de baile retro, con los sonidos característicos del chip Paula marcando el pulso.

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Conclusión: la emoción de la nostalgia viva

Cuando las luces comenzaron a apagarse y los cables a recogerse, quedó en el aire una sensación de satisfacción y asombro. Este 12º encuentro no fue solo una exposición de máquinas antiguas: fue una celebración de la creatividad, la amistad y la memoria tecnológica.

Cuatro décadas después, el Commodore Amiga sigue demostrando que fue una obra maestra adelantada a su tiempo. Verlo en funcionamiento, escucharlo, tocar sus teclas, entender su arquitectura y revivir sus programas no es un simple ejercicio de nostalgia: es reconocer que aquella filosofía de diseño —centrada en el usuario, en la multitarea, en la integración del arte y la técnica— sigue vigente hoy.

Sólo para nuestra pesar queda el hecho de que estuvimos intentando retransmitir el evento, pero no pudimos sino ya cuando era muy tarde, seguramente el siguiente que hagamos será retransmitido para el resto de compañeros que no pudieron asistir.

RetroCanarias, una vez más, logró reunir a una comunidad apasionada que mantiene vivo el espíritu de una época donde todo parecía posible. Y aunque los equipos pesen más, los disquetes fallen y los monitores necesiten más espacio del que tenemos, hay algo que nunca se deteriora: la ilusión por compartir el pasado para entender mejor el presente.

Así concluyó el 12º Encuentro de Usuarios de Retroinformática de RetroCanarias, entre risas, nostalgia y el zumbido de los viejos monitores CRT. Y como ya es tradición, todos nos fuimos pensando en lo mismo:

“¿Con qué nos sorprenderán en el próximo encuentro?”

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